Retrato realista con motivos florales y orgánicos.

El tatuaje muestra un retrato realista de un rostro humano, combinado con delicados elementos florales como flores, enredaderas y hojas. El retrato está realizado con gran atención al detalle: ojos expresivos, pómulos definidos y textura de la piel. Los elementos vegetales enmarcan perfectamente el rostro, creando una composición armoniosa y elegante. El diseño se caracteriza por líneas precisas y matices sutiles, combinando realismo con la belleza natural de las plantas. Todo está colocado sobre un fondo blanco y limpio, lo que le da al tatuaje un carácter moderno y artístico.